FELIZ 2020
FELIZ 2020: “Necesitamos aprender a ver la ciudad desde una mirada contemplativa, esto es, una mirada de fe que descubra al Dios que habita en sus hogares, en sus calles, en sus plazas. La presencia de Dios acompaña las búsquedas sinceras que personas y grupos realizan para encontrar el apoyo y sentido a sus vidas. Él vive entre los ciudadanos promoviendo la solidaridad, la fraternidad, el deseo de bien, de verdad, de justicia…”
Empezamos algo nuevo
Constantemente estamos cambiando de etapas. Finales y principios de cursos, de temporadas, de años… terminar y comenzar forman parte de la vida. Y siempre es útil, cuando llega un momento de cambio, echar la vista a lo que se nos va, para aprender de ello, y echar la vista a lo que viene, para proyectar, planificar, soñar y construir.
Es bueno que aprendamos de lo vivido, de los aciertos y de los errores. De lo que nos ha ayudado a crecer y/o que nos ha impedido avanzar. Aprender a admitir los fracasos que hayan podido llegar y celebrar los logros sin perder la humanidad.
Es bueno mirar al futuro e imaginar posibilidades. Fijarnos metas, en relación con las gentes, con lo que hacemos, con la vida. Metas para los momentos de descanso, para el trabajo…
Qué bonito será si sabemos construir puentes para unir a quienes están separados; mesas donde puedan tener cabida los que nadie quiere; casas que sean hospitalidad para quien tiene miedo; palabras que lleguen al corazón del solitario; nuevos caminos que conduzcan a tierras fértiles, que produzcan, para todos, alegría, tolerancia, justicia y compresión. Intentémoslo.