“DE NUEVO, LLAMADOS Y ENVIADOS A LA MISIÓN”

Finalizado el paréntesis veraniego, iniciamos un nuevo curso pastoral en nuestra parroquia. Lo empezamos en el nombre del Señor, con mirada agradecida a lo ya vivido, y pensando en este curso que se inicia, lo hacemos con fe y confianza en Dios Padre, con alegría y disponibilidad, con entrega y esperanza. Nuestro seguimiento de Jesús se va concretando en el día a día de nuestra parroquia, de nuestra familia, de nuestro trabajo, de nuestro barrio. 

Para programar el presente curso nos ayudará el trabajo realizado en la Jornada Diocesana de Comienzo de curso del 20 de septiembre, y también la reflexión que se realice en el Consejo Pastoral Parroquial de Inicio de Curso del 27 de septiembre. En él retomaremos lo reflexionado en el Consejo de final de Curso, del 7 de junio pasado. Seguiremos creciendo en comunión, participación y misión, para ser en medio de nuestro barrio una Comunidad parroquial que acoge y sirve a todos, pero de forma especial a los pobres y los que sufren, una comunidad que ora y celebra la fe y la vida, una comunidad que anuncia y testimonia el gozo del Evangelio. Una parroquia “en salida”, “de puertas abiertas”, que sale al encuentro de cada persona, teniendo en cuenta a los alejados y ausentes. Este curso tomaremos conciencia de que la Eucaristía es fuente, centro y culmen de la vida cristiana (cf. LG 11), para celebrarla existencialmente y tomar de ella la gracia para continuar viviendo lo que en ella celebramos. La Eucaristía es la fuente de la misión del cristiano y de la comunidad eclesial, porque infunde en el corazón la caridad de Cristo y la esperanza del reino de Dios.

El Plan Diocesano VITA sigue teniendo como lema añadido para este curso: “Asamblea de llamados para la misión”. Pueblo de Dios que camina unido, conscientes de la dimensión vocacional de nuestra vida cristiana, ayudándonos a tomar conciencia de la dimensión misionera de nuestra fe.

Somos llamados a crecer como comunidad parroquial, como comunidad de discípulos misioneros, como signo de Esperanza para todos. El sábado 4 de octubre tendremos la oportunidad de realizar como parroquia, con motivo del Jubileo de la Esperanza, la Peregrinación Jubilar a Daroca, a la Basílica de Santa María de los Sagrados Corporales, uno de los Templos Jubilares de nuestra diócesis.

¡Feliz curso a todos! Encuentra tu lugar y participa en la vida de la comunidad parroquial. El Señor camina con nosotros, y en su nombre, de nuevo, nos levantamos y ponemos en camino.