BODAS DE ORO SACERDOTALES DE MANOLO LIARTE GUARDIA

La mañana empezó con un sol radiante, sabía que celebrábamos en nuestra parroquia los 50 años como sacerdote de un cura bueno, nuestro Manolo.

La Eucaristía empezó con un escrito de Pilar Castillo que nos emocionó a todos, a continuación podeis leer estas hermosas palabras.:

LLAMADA Y RESPUESTA

Tocaban las campanas a misa primera era un día de invierno en un pueblo, Maella del Bajo Aragón para dar más señas. El alba cantarina alegraba esta tierra porque nacía un niño que llevaba una estrella para poner luz y vida como Cristo lo hiciera. El niño fue creciendo… Y Dios encendió en su alma una hoguera con sarmientos de entusiasmo y entrega. Mientras otros niños jugaban, él se iba a la iglesia a pedirle a la Virgen con inocente fuerza:

¡Madre, quiero ser cura y Tú harás que lo sea!

Años de seminario… La semilla crecía en su fértil tierra la regaba el Espíritu con piedad y ciencia. Se cumplieron los sueños de llamada y respuesta. Y seguía las huellas que Cristo fue dejando mirando hacia el cielo y pisando la tierra. La respuesta del Sí… Veintinueve de octubre de mil novecientos setenta y dos sellaste con un SI y postrado en tierra se hizo realidad conscientemente tu ilusión primera, y fuiste pan partido en Andorra y en Cretas, Madrid, El Buen Pastor, el Portillo, el Actur sembrando el Evangelio que dará fruto fértil aunque tú nunca recojas la cosecha

¡Gracias, Manolo Liarte! ¡Gracias padre, amigo, hermano, espiritual, humano! ¿Ves nuestros corazones saltando de alegría? Pasas rus bodas de oro en nuestra compañía, Treinta de octubre de dos mil veintidós ¡Gracias, muchas gracias a ti y a nuestro Señor! Porque eres el regalo que Él nos entregó.

¡¡¡FELICIDADES!!! Te quedas en el corazón de los hijos de la Virgen del Portillo

Texto Pilar Castillo

Tras estas emotivas palabras continuó la Eucaristía con gran participación de feligreses, de ayer y hoy, en las lecturas, preces y ofertorio, sin olvidarnos de nuestros coros; fue un misa muy participativa,.

En la homilía, Manolo lo primero que hizo es darnos las gracias por este momento y pedir perdón por si alguna vez nos había fallado. Nos habló de su experiencia como sacerdote, y cómo paso de D. Manuel a Manolo en una de esas parroquias en las que estuvo. Somos iguales en el servicio.

Para finalizar la Eucaristía, algunos de los hijos de matrimonios casados por Manolo en la Parroquia le hicieron un pequeño detalle: un álbum de fotografías de su vida, un poster hecho por los niños y unos libros.

Y tras la bendición, vimos un vídeo hecho con las fotos que estaban en el álbum.

A continuación pasamos a los locales para felicitar a Manolo y reencontrarnos con los diferentes amigos que hacía tiempo que no veíamos.

Fue una jornada de muchas emociones y sentimientos.

GRACIAS MANOLO POR TU SERVICIO.