JORNADA MUNDIAL POR LA PAZ: Invitación a la no Violencia

Ser hoy verdaderos discípulos de Jesús significa también aceptar su propuesta de la no violencia. Esta como afirmaba el papa Benedicto, “es realista, porque tiene en cuenta que en el mundo hay demasiada violencia, demasiada injusticia y, por tanto, solo se puede superar esta situación contraponiendo un plus de amor, un plus de bondad. Este plus viene de Dios” (Papa Francisco en el Ángelus del 18 de febrero de 2017)

Jornada Mundial de la Paz 2020: “La paz como camino de esperanza: diálogo, reconciliación y conversión ecológica”

“Toda guerra, en realidad, se revela como un fratricidio que destruye el mismo proyecto de fraternidad, inscrito en la vocación de la familia humana”. Lo recuerda el papa Francisco en el Mensaje para la 53 Jornada Mundial de la Paz, que se celebra el 1 de enero.

“La guerra, explica el papa, comienza a menudo por la intolerancia a la diversidad del otro, lo que fomenta el deseo de posesión y la voluntad de dominio. Nace en el corazón del hombre por el egoísmo y la soberbia, por el odio que instiga a destruir, a encerrar al otro en una imagen negativa, a excluirlo y eliminarlo”. La guerra, añade Bergoglio, “se nutre de la perversión de las relaciones, de las ambiciones hegemónicas, de los abusos de poder, del miedo al otro y la diferencia vista como un obstáculo; y al mismo tiempo alimenta todo eso.

Sin embargo, subraya el Mensaje, “el deseo de paz está profundamente inscrito en el corazón del hombre y no debemos resignarnos a nada que sea menos que esto”. “¿Cómo construir un camino de paz y de reconocimiento mutuo? ¿Cómo romper la lógica morbosa de la amenaza y el miedo? ¿Cómo acabar con la dinámica de desconfianza que prevalece actualmente?

A través del camino de la escucha basado en la memoria, en la solidaridad y en la fraternidad; a través de la reconciliación en la comunión fraterna; a través de la conversión ecológica.

Recordemos: “la paz no se logra si no se la espera”. Hay que creer en la posibilidad de la paz.